La cerveza artesanal Kunstmann, de Valdivia, Chile, abrió su local en Playa Bonita, el primero en Argentina. El emprendimiento, que incluye una fábrica de cerveza con elaboración a la vista, demandó una inversión de 3 millones de dólares y se suma a la variada oferta gastronómica local, destinada a los residentes y turistas. El restaurante y brew pub es administrado en forma de franquicia por el empresario local Walter Jaume y su familia.
La inauguración contó con la asistencia del fundador de la cerveza trasandina, Armin Kunstmann, quien cortó la tradicional cinta junto a su esposa, Walter Jaume y directivos de Compañía Cervecerías Unidas (CCU), socios de la familia trasandina y responsables de la distribución de la cerveza en Sudamérica. También participaron empresarios locales y varios fabricantes de cerveza artesanal local.
El local, ubicado en el kilómetro 8 de la ruta al Llao Llao, se emplaza en un edificio de más de 1500 metros cuadrados, con restaurante, salón para eventos (donde funciona un museo de cerveza) y una boutique para la venta de souvenirs. También hay una amplia barra, con despacho de cerveza mediante choperas y una planta a la vista, que elaborará alrededor de 10.000 litros mensuales. El predio incluye estacionamiento vehicular para alrededor de cien automóviles, algo poco habitual en los nuevos emprendimientos que se abren en la ciudad.
La llegada de Kunstmann generó cierta inquietud en los cerveceros artesanales locales, ya que la envergadura de la empresa representa una seria competencia para los emprendimientos existentes. No obstante, numerosos fabricantes concurrieron a saludar a Armin Kunstmann, pues más allá de la lógica competencia de mercado, reconocen que el emprendimiento suma una importante propuesta a la oferta local. “Bariloche es sinónimo de cerveza artesanal, es importante que esta marca también esté en la ciudad”, explicó Jaume.
Bruno Ferrari, maestro cervecero de Berlina, recordó su arribo a esta ciudad hace una década, cuando con sus dos hermanos decidieron crear la cerveza Berlina. “Lo importante es que la cerveza que se elabore sea buena. Luego, cada consumidor puede elegir dónde ir a tomar”, evaluó. Por su parte Francisco “Pancho” Colona, de la cervecería La Cruz, también evaluó que el nuevo brew pub será solo una opción más en la ya variada oferta local. “Bariloche tiene más de 20 buenos pub, confío que este mantenga la buena calidad que nos caracteriza”, afirmó.
La cerveza chilena es la segunda franquicia que se instala junto al Nahuel Huapi, donde arribó hace una década Antares, la cervecería artesanal más grande de Argentina, que se elabora en Mar del Plata.
El nuevo local abrirá sus puertas al mediodía y la noche, con variedad de comidas para compartir con la cerveza, como ser picadas, pizzas, goulasch y salchichas con chucrut.
“Buscamos repetir los aspectos positivos de nuestra cervecería en Valdivia, pero con impronta local”, afirmó el empresario trasandino. Al respecto, dijo que la planta elaboradora de cerveza fue adquirida en este país, marca Velo, con tecnología argentina e italiana.
La cerveza se hará con malta argentina y el lúpulo y la levadura serán importados. Comenzarán ofreciendo 7 variedades de cerveza: rubia, dorada y morena, entre ellas las famosas Torobayo. La planta será operada inicialmente por expertos trasandinos pero el maestro cervecero es local, Emilio Jaume, hijo del empresario titular de la franquicia.
La cerveza solo se comercializará en el pub y no se envasará, ni en barriles ni botellas. Esto obedece a que la distribución de todos los productos Kunstmann está a cargo del grupo empresario CCU y asimismo, la empresa no busca competir con los emprendimientos locales. Algo similar realiza la cerveza Antares, de Mar del Plata, que también tiene una franquicia local y envía el producto envasado desde el mar.
Walter Jaume dijo que el nuevo local generó una docena de nuevos puestos de trabajo y que en temporada alta esta cifra podría aumentar. Destacó que el lugar tiene una moderna cocina, donde se elaborarán platos maridados con cerveza.
La cerveza Kunstmann comenzó a fabricarse en 1997 y en el 2002 se asoció con la Compañía Cervecerías Unidas (CCU). En el 2013 envasaron más de 8 millones de litros y la facturación superó los 10 millones de dólares.
CCU es una de las compañías de bebidas más importantes de Argentina, la segunda más grande del mercado cervecero y un actor relevante en los de sidras, licores, destilados y vinos. Distribuye Heineken, Budweiser, Imperial y otras 12 cervezas. Son socios en Kunstmann al 50 por ciento.
