Tener un huerto con hierbas y vegetales frescos durante todo el año no es tendencia exclusiva de restaurantes gourmet. Con el método hidropónico pueden cultivarse todo tipo de hojas verdes y condimentarias en el ambiente de un hogar.
Nacido en el 2013 y conducido por sus propietarios Silvina Beltran y Diego Mingorance, el invernadero hidropónico más grande de la Patagonia abastece a decenas de particulares y restaurantes que solicitan a diario productos novedosos como las hojas orientales -pack choi, mizuna, tatsoi, mostazas, katsuma- o tradicionales como la lechuga mantecosa, flecha dorada, hoja de roble, la roja maravilla y una decena de otros productos.
Su formidable impacto empresarial hizo que recientemente sean distinguidos a nivel nacional por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) a través de CAME Joven. Y eso no es todo, fueron designados representantes de CAME en Bariloche, con lo cual cientos de productores podrán acceder a los beneficios que se ofrecen para pequeñas y medianas empresas.
El invernadero de HidroFlora, construido en los albores del lago Moreno, permite producir más de 3500 plantas y está equipado con controladores de agua y temperatura, extractor de aire, media sombra y calefacción.
Entre sus novedades, comenzaron a construir sistemas que se adaptan a cualquier ambiente de un hogar. Se construyen con tubos de PVC, manguera, tanque, bomba y aireador y entre sus beneficios se destacan el cultivo escalonado, es decir, los caños se acomoden uno sobre el otro obteniendo una cantidad considerable de plantas es un espacio reducido. Otro beneficio es la rápida recuperación del capital invertido.
En junio HidroFlora brindará un curso-taller en la escuela El Obrador. El mismo se desarrollará en cuatro clases teórico prácticas en las cuales se aprenderá a cultivar todo tipo de verduras, hortalizas y plantas aromáticas. Asimismo se abordarán conceptos claves, floating, cultivo en sustratos inertes, cultivos horizontales y verticales, manejo de semillas y siembra, medición de pH y electro-conductividad y mantenimiento de sistemas hidropónicos. El costo del taller, que comenzará el primer domingo de junio de 14:00 a 17:30, es de 1200 pesos e incluye un manual con todos los contenidos vistos.
“Es importante colocar estos sistemas en ambientes luminosos, cerca de ventanales que además brinden calor ya que las hojas y los frutos requieren al menos 25 °C”, explicó Silvina.
En cuanto a la siembra, las semillas orgánicas son germinadas en un sustrato inerte -medio sólido pero sin vida, que protege y da soporte a la planta para el desarrollo de la raíz-. Una vez que ésta crece firme se acomoda la planta en los caños de PVC para que continúe su desarrollo.
Para su germinación, la mayoría de las semillas requieren que la bandeja de cultivo esté a oscuras, lo que se denomina “germinación cerrada”. Una vez que comienzan a brotar pasan a una media sombra y luego de sus dos primeras hojas están preparadas para recibir mayor intensidad de luz.
Es beneficioso aprender a reconocer buenas semillas. “Las mismas no deben estar pintadas –esto significa que están curadas para exportación- rotas ni tachadas. Las semillas de la zona se adaptan rápidamente, sin embargo si son típicas de otras regiones o importadas deberemos colaborar en su adaptación ya que las semillas guardan el recuerdo del clima de donde provienen” aclaró la experta.
Entre otros cuidados, el del agua es una condición. “Hydro” significa agua y “ponos” trabajo, por tanto se requiere que este principal componente sea el más favorable para este tipo de cultivo orgánico. Todos los cuidados posibles permitirán tener un huerto casero que funcione en perfectas condiciones todo el año. Si los cuidados son óptimos el tiempo de cosecha es menor al convencional en un 40%.
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