Carnes de kobe a la carta, la más rica y sabrosa del mundo

0

De origen japonés, el método de producción de esta carne vacuna llego a las tierras de Tandil y desde allí se distribuye a varias provincias del país. Muchos restaurantes hacen sus pedidos, entre ellos, El Patacón, de Bariloche.

Si bien su valor es elevado, el pedido que realizo el restaurante en el último mes se ha vendido por completo. Unos 100 gramos de esta carne tienen un valor de $85, es decir que reemplazar un bife de chorizo tradicional,  cuesta más de $350. Novedoso el precio, pero más novedoso su sabor y textura.

El Kobe Beef, es un bife que sale de vacas de la raza Wagyu, que originariamente pastaban solo en las praderas de Japón, en la provincia de Kobe, y que tienen como diferencial  un intenso marmolado de grasa intramuscular. Esto logra que sea mucho más tierna de lo que jamás se pensó que podía ser una carne, además de ser muy sabrosa.

Desde principios de esta década hay una empresa argentina que importó la genética (embriones y semen congelado), la metió dentro de nuestras más pampeanas Angus, y empezó a crear Wagyus que mugen en castellano. La calidad resultó más que buena y así el país se empezó a convertirse en un interesante exportador de esta carne a precios muy caros, pero aún así mucho más baratos de lo que cuesta la verdadera Kobe nipona.

Antes de realizar el pedido, los comensales son asesorados previamente por los mozos  en cuando a las características de este producto. Una carne baja en grasas y colesterol, y un sabor que los especialistas de todo el mundo resumen en “un manjar”. Tierna, muy tierna, sin nervios. Al masticarla da la sensación de que se rompen como burbujas de crema, es mantecosa. No es una carne que se corta con cuchara pero su textura es sutil, jugosa, aterciopelada, comparable con el foie gras.

Además de las características mencionadas, el contenido graso es de aproximadamente la mitad de los niveles de grasa saturada encontrada en la mayoría de las carnes tradicionales y es muy rica en Omega 3.

En la Argentina, el kilo cuesta unos 60 dólares, mientras que en Europa se vende a 200 euros. Nadie duda de que comer carne en nuestro país es un verdadero lujo, los cortes tradicionales son para muchos amantes irremplazables, aun así la más cara del mundo se suma a las opciones convirtiéndola en una excentricidad sólo para unos pocos. Es un producto saludable, fácil de digerir, tiene su grasa distribuida dentro de la masa muscular y no alrededor.

En cuanto a las crías, los animales requieren un cuidado minucioso. Todos los días reciben masajes mientras escuchan música clásica, lo cual les ayuda a relajar y conseguir un buen tono muscular. Está estudiado que estos masajes ayudan a que los animales estén más tranquilos, relajados y satisfechos, lo que redunda en una carne de una mayor calidad que las de animales sometidos a estrés.

La dieta de los ganados incluye cerveza, lo cual estimula el apetito del buey y gracias a ello comen más forraje. Además la cerveza interactúa con la grasa del organismo con un resultado excepcional, la carne apenas contiene grasa.

Otro cuidado que los ganaderos proporcionan, es el “baño de sake“. Cada cierto tiempo y durante varias horas, los Wagyu son lavados con este tradicional licor japonés. La piel limpia y perfumada con sake influye también en la calidad de la carne.

Tandil se ha convertido en una zona de producción de estos ejemplares vacunos en el país y de allí, El Patacón suma a su carta de carnes esta exitosa opción y a pesar de que sorprendió la demanda dejando al establecimiento sin stock, la situación se regularizara a la brevedad y la oferta seguirá vigente. Un detalle no menos atractivo: los residentes obtendrán durante todo el mes de agosto un 35% de descuento en toda su carta.

Compartir