Concurrido Congreso del Lúpulo

0

La cuarta edición del Congreso del Lúpulo que acompaña la Fiesta Nacional del Lúpulo de El Bolsón resultó un éxito y confirma la solides del sector cervecero que elabora birra artesanal. Más de 500 personas se congregaron durante dos jornadas en el auditórium de Lago Escondido para escuchar una docena de conferencias a cargo de expertos.

El congreso creado por Hernán Testa consolidó su prestigio y confirmó ser uno de los mejores de Sudamérica. La cuarta edición tuvo un ingrediente clave para ello: el lugar de las conferencias, muy superior a las ediciones anteriores. El recinto, con buen sonido y suficiente capacidad, permitió asimismo compartir los almuerzos y los coffee y beer break. Una medida ponderada por los asistentes.

Medio millar de personas asistió al Congreso del Lúpulo.

Durante las dos jornadas media docena de colectivos trasladó a los participantes desde el hotel Cumbres, en el centro de la ciudad, hasta el complejo. El resto de los participantes concurrió en automóviles particulares. El complejo brindo sus instalaciones y también preparó los almuerzos.

Cuatro de los expositores fueron extranjeros. Frank Peifer, de Hopsteiner, Alemania; Patrick Zanello, de Fermentis, Brasil; Richard Shaye, de Hospteiner, Estados Unidos y Willi Mitter, de Hopstainer, Alemania. Todos referentes de las mayores proveedoras de lúpulos y de levaduras en el mundo.

Hernán Testa y Marcos Ragoni.

Pfeifer, con una extensa trayectoria en la cervecería Heineken, dictó dos conferencias. La primera sobre la elaboración de IPAs, NEIPAs y BRUT IPAs y la segunda sobre el comportamiento de componentes aromáticos en diferentes etapas: ebullición, Whirpoll y Dry-hopping. Zanello habló sobre la interacción de las levaduras y el lúpulo y sus implicancias sensoriales y Mitter sobre los productos de lúpulo, extractos y aceites, su utilización y beneficios para el cervecero. Shaye expuso sobre la comercialización de lúpulo, sus resultados, estadísticas y tendencias.

Durante el primer día las charlas comenzaron con la de Hernán Testa, ingeniero agrónomo y productor de lúpulos, quien se explayó sobre el cultivo, procesamiento y comercialización del lúpulo en Argentina. Luca Fernández Chinigo, de la cervecería Astor, La Plata, habló sobre la evolución de las IPAs en Argentina y Marcos Ragoni sobre la influencia de la composición fisioquímica del agua en el perfil lupulado de una cerveza.

La cerveza se distribuyó en forma de autoservicio. Solo había que tener el vaso para llenarlo.

La segunda jornada comenzó con dos referentes del Instituto Andino Patagónico de Tecnologías Biológicas y Geoambientales (IPATEC). Su director, Diego Libkind, habló sobre la levadura patagónica eubayanus. Recordó su descubrimiento y su evolución en la industria cervecera. También vertió aspectos técnicos de esa levadura, salvaje, bautizada “Euby” para el mercado cervecero. “Es una levadura complicada, pero permite un nuevo horizonte en el mercado cervecero”, explicó Libkind.

Hernán Testa junto a Gabriel Blazewicz, quien llevó un barril de cerveza Kunstmann elaborada en Bariloche.

También resumió datos de su utilización en ocho cervecerías cordilleranas que ya elaboran cerveza con esa levadura. También presentó el proyecto “Levadura Salvaje” y los presentes pudieron degustar la primera cerveza elaborada cien por ciento con ingredientes de la zona de El Bolsón: agua de deshielo, lúpulos de Mallín Ahogado, la levadura eubayanus y cebada cultivada en la zona y malteada en destilería La Alazana. La cocción se realizó en la cervecería Auka, emplazada en el centro de la ciudad.

A su término, Andrea Trochine, expuso sobre los avances en el control de calidad e innovación en el lúpulo de Argentina.

Andréa Trochine, durante su exposición.

El congreso culminó con la conferencia de Hernán Castellani, de la cervecería Sir Hopper, de Buenos Aires, quien explicó cómo lograr el perfil ideal en la elaboración de las cervezas IPAs.

Sin duda un congreso de alto nivel académico, muy instructivo, bien organizado, que fue ponderado por los asistentes. Un dato atípico es que su asistencia no tenía costo, solo había que pagar los traslados en micro, en caso de usarlos.

Cada asistente recibió un vaso de vidrio, aportado por sponsors, y en el pudo degustar una amplia variedad de cervezas artesanales llevadas por diferentes productores. También la birra diseñada por el IPATEC, elaborada con productos patagónicos.

Es de esperar que el presente evento se repita el año próximo.

Compartir