“Experimento, pero la base de mi cocina tiene acento propio”.

0

Con personalidad carismática y con orgullo de ser francés, el chef Christophe Krywonis, expresa su pasión por las carnes que se crían en la Patagonia y su combinación con los productos autóctonos.

Si bien sus inicios como cocinero comenzaron en cocinas francesas asegura que, gracias a sus tantos viajes a diferentes países de América Latina, muchos de sus platos favoritos pertenecen a estas regiones del continente.

“Estoy orgulloso de ser francés, amo Francia y aunque el centro gastronómico más importante es París no podría vivir allí. La exclusividad me aburre”, expresó Christophe, con la mirada atenta.

“Gran parte de mi cocina pertenece a mis orígenes pero no me privo de conocer y disfrutar, como buen aventurero, la infinidad de cosas interesantes que ofrecen otros lugares del mundo. En América Latina, el estilo de vida es otro,  hay miles de productos y recetas y es un placer sumarlos a mis conocimientos”, agregó.

Desde Argentina a México, asegura que hay una multitud de culturas para descubrir. Le atrae la cocina colombiana, peruana y mexicana, entre varias otras.

De Paris viajó a Mendoza en 1989 de la mano de Martin Pittaluga, un cocinero uruguayo que le ofreció trabajar en Las Leñas. Desde entonces, la Argentina lo invito a recorrer sus tierras y a quedarse en ellas.

Christophe reside actualmente en Buenos Aires, en donde trabajó en la cocina de importantes restaurantes hasta tener el suyo propio. En los últimos años se convirtió en una de las estrellas de elgourmet.com y hasta fue convocado para realizar un doblaje para la versión latina de la película animada Ratatouille. Hoy, viaja mucho por trabajo, especialmente a Colombia y Perú, dando seminarios, clases de cocina, asesoramientos y realizando el trabajo gastronómico para importantes eventos, también en nuestro país.

Fue uno de los invitados especiales durante el pasado encuentro de Chefs de Altura en Villa la Angostura, en donde elaboró un menú por pasos en la cocina de Las Balsas, junto al chef Pablo Campoy, de quien expresó su admiración, al igual que para Leo Morsella, chef y propietario del restaurante Waldhaus, ubicado también en aquella localidad.

Le encanta elaborar platos con carnes de la Patagonia, especialmente ciervo, jabalí, ganso, conejo, liebre y codorniz. “De niño acompañaba a mi papá y a mi abuelo a cazar al Valle de la Loira, una región de Francia en donde se disponen grandes bosques para esta práctica. Acá en Argentina, viajo seguido a Junín de los Andes en donde, a parte de visitar a buenos amigos, salgo a cazar. No mato por deporte, pero me es placentero porque todas mis presas son el menú de la cena”, explicó Krywonis.

“Me gusta elaborar hamburguesas de carne de jabalí. Como es una carne dura, la pico, le agrego cebolla, condimento la mezcla, las horneo y una vez listas las unto con queso azul”, agregó el chef, respondiendo a cada pregunta para Visión Gourmet

Durante el 6º Festival del Chef Patagónico, el pasado 23 y 24 de abril, elaboró en público costillas de cordero sobre un colchón de arroz cocido en leche de coco, remarcando su admiración por la cocina colombiana y las carnes de la Patagonia. “Los cocineros que se desempeñan en estas zonas cordilleranas saben trabajar bien con los productos de este mercado y es por ello que su gastronomía se valoriza cada vez mas.

“Me gusta la simplicidad en los sabores, hay que valorar la esencia de cada producto. Nadie nace sabiendo sobre ingredientes, orígenes, técnicas de cocción, combinaciones, etc. en la cocina todo se aprende y mis primeros pasos los di en Francia, con mi abuela, por ello, aunque me guste experimentar en culturas nuevas, gran parte de mis elaboraciones tienen acento propio”, expresó el reconocido chef.

No es amigo de la cocina 100% vegetariana, “no va conmigo, ni con mi cuerpo ni con mi alma”, agregó chistosamente.

Christophe Krywonis está atento a las invitaciones que se hagan desde Bariloche. Confiesa que solo ha estado de pasada en la ciudad y que debe su visita a recomendados restaurantes de la ciudad.

Compartir