Gastronomía en las termas

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El hotel Puyehue es el más cercano a Bariloche para disfrutar de las aguas termales en un complejo de excepcional belleza. Tiene servicios categoría cinco estrellas y totaliza 43.000 metros cuadrados cubiertos en un parque de 600 hectáreas. Sus ricas aguas termales, reconocidas por su pureza y cualidades curativas, se complementan con una exquisita gastronomía en distintos restaurantes, donde se pueden probar platos de la tradicional cocina chilena y también productos gourmet, de nivel internacional.

El hotel Termas Puyehue Wellness & SPA Resort es dirigido hace dos años y medio por el holandés Kees Aerts, gerente general del emprendimiento. Es el creador del primer hotel cinco estrellas con servicios all inclusive de Chile, una iniciativa que literalmente revolucionó la operatoria del tradicional hotel cordillerano. Kees es un experto en operar hoteles all inclusive, por cuanto trabajó durante 14 años en estos establecimientos, en la zona del Caribe, Cuba y Punta Cana. Kees es secundado en la gerencia por Claudio Soto.

La modalidad “all inclusive” nació en los hoteles del club Med hace cuatro décadas y luego se expandió por todo el mundo. Permite incluir en una tarifa fija una gran variedad de servicios, que por cierto es limitada. No obstante es una modalidad muy ponderada por el público y permitió que las visitas al hotel Puyehue se incrementen en un 22 por ciento anual, desde el arribo del holandés a la cordillera.

Según explicó Kees un tercio de los visitantes participan en reuniones ejecutivas, para lo cual el lugar dispone de un centro de reuniones y convenciones, con servicios corporativos. En la actualidad alrededor del 70 por ciento del público que se aloja en el hotel es chileno y del 30 por ciento de extranjeros los barilochenses orillan el 17 por ciento. Esto motivó que a partir de mediados de marzo y el mes de abril se establezcan interesantes promociones, que prometen prolongarse durante el mes de mayo.

En primer término, durante su vigencia, los menores de 12 años no pagan, lo cual es un importante incentivo para los viajes en familia. Asimismo, rige una promoción del 2×1, de lunes a jueves, y un descuento general del 25 por ciento para los residentes en Argentina. A este  descuento se debe sumar la devolución del IVA, que en Chile es del 19 por ciento, por lo cual el descuento neto orilla el 50 por ciento.

Así mismo, de lunes a jueves, los mayores de 55 años disponen de un descuento del 50 por ciento sobre las tarifas, durante todo el año y igual promoción rige en el complejo termal “Aguas Calientes”, cercano al hotel.

Además del alojamiento y las comidas el all inclusive incluye el uso de las tres piscinas del hotel (cubierta, semi techada y al aire libre) en el horario de 08 a 20. También, con reserva previa, se accede a los servicios de sauna, spa, hidroterapias, masajes, baños de barro y otros tratamientos, a cargo de profesionales.

También hay una biblioteca, kids club egos, con mesas de billar, pull, tenis de mesa, metegol, juegos de mesa y un moderno bowling, muy ponderado por los huéspedes. Hay servicio de wi-fi, televisión por cable en todas las habitaciones y una sala de cine.

Además de los servicios en el hotel hay una amplia variedad de programas out door. Hay caminatas, paseos en mountain bike, cabalgatas, tenis y cancha de fútbol. También hay un servicio de traslado hacia el lago Puyehue, donde se puede practicar windsurf y pasear en kayac, botes a remo y a vela y bicicletas de agua. No hay actividades náuticas con embarcaciones a motor. También se puede jugar al golf, para lo cual el hotel dispone de un traslado a la cancha  de golf de Osorno, con gren free en los 18 hoyos.

Entre los paseos por el parque del hotel cabe recomendar los miradores hacia el río Chanleufu, “La Cascada”, “La Leona” y “El Pudú”, que insumen entre 1.3 y 2 horas de cómoda marcha, por senderos señalizados.

La gastronomía es obviamente uno de los aspectos más importante dentro de los servicios all inclusive. Cesar González es el chef ejecutivo del establecimiento y dirige los tres restaurantes, con menú internacional y servicios buffet. El restaurante principal se denomina “Los Troncos” y también hay dos restaurantes gourmet, que requieren reserva previa. “Olivia Nova” se especializa en gastronomía italiana y el “Lago Puyehue” en comidas fusión chileno, pescados y mariscos.

González explicó que los vinos de la casa son de la bodega Montgras y el agua mineral que se consume en el hotel es propia, Agua Mineral Puyehue, embotellada en las cercanías del establecimiento. También hay una carta de vinos Premium, con costo.

Durante la cena en “Olivia Nova”, donde asistió Visión Gourmet, se comenzó con el autoservicio en el mesón antipasto, con entradas de ensaladas, fiambres, tartas, terrinas y sopas.

Luego, con servicio de camareros, se sirvió una trilogía de pastas rellenas: capelettis de aceituna rellena con queso de cabra, triglioni de espinaca rellena con cangrejo y ravioli de huevo rellenos con picata de res. Tres delicias gourmet.

No obstante, los agnolottis, con tinta de calamar, rellenos de cordero patagónico, en salsa de tres quesos y pintas de pésto, merecieron la máxima ponderación. Un verdadero manjar, muy bien maridado con el merlot de Montgras.

De postre fue servido el tiramisú, típico de Italia, en una tasa construida con chocolate semi amargo, una delicia tanto para la vista como al paladar. También se pudo probar los profiteroles, rellenos con nata y crema pastelera, servidos sobre un espejo de chocolate y menta.

La velada se prolongó en el bar El Pescador, muy bien atendido por Víctor, hace ya varios años. Sus piscos y tragos gozan de merecida fama no solo en Chile y Bariloche, también en otras regiones, cuyos habitantes tuvieron la dicha de tomarse algunos tragos en el hotel Puyehue.

En materia gastronómica también se puede pedir un transfer para visitar el restaurante Fogón Puyehue, a 11 kilómetros del hotel, sobre la ruta internacional y con vista al lago, donde se sirven comidas típicas chilenas. Este servicio es con cargo.

Otro lugar recomendable para visitar es la cava de finos del hotel, aledaña al restaurante Los Troncos, con alrededor de 300 etiquetas, que abre de jueves a sábados, de 13 a 18 y 20 a 22.30. Allí se pueden comprar excelentes vinos chilenos y algunos importados.

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